Ahora que se acerca el calor, toca el momento en cambiar todo lo que era de invierno, como la ropa, pero no solo la de vestir, también la de casa por tejidos más ligeros y veraniegos. Uno de ellos es el lino, fibra vegetal ideal para esos meses de más calor.
El lino, es fresco y agradable al tacto. Esta fibra ya se empleaba en el antiguo Egipto y también se utilizó en toda Europa desde cientos de años atrás. De hecho, hasta la llegada del algodón, el lino era la fibra textil más importante después de la lana.
Actualmente en el hogar se suele utilizar el lino entre las más habituales, como la ropa de cama, mas fresca y agradable en verano. En esta época podrás encontrar numerosas tiendas con modelos distintos y colores muy diferentes. ¡Para todos los gustos!
Pero además de la ropa de cama, los cojines, por ejemplo, son otra gran fuente de inspiración para el lino. Encontrarás algunos hechos artesanalmente, serigrafiado e incluso algunos elaborados con antiguos sacos en los que se guardaba la harina.
La cocina también se viste de primavera y de verano, con la llegada del sol. Por ejemplo, con trapos de cocina realizados en lino. Es una opción muy decorativa sin dejar de lado el sentido práctico del objeto. Las rayas multicolores, blanco, estampados florales o cualquier otro estilo que se te ocurra.
En el comedor, los manteles clásicos de lino son perfectos para cualquier ocasión junto con sus servilletas a juego.
¿Os atrevéis a decorar con lino?
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