¿Necesitas un cerrajero de urgencia? ¿se ha roto algún electrodoméstico de tu casa y necesitas repararlo? En estas ocasiones es inevitable que pensemos en el desembolso de la reparación y sobre todo en el coste del técnico, que suele ser, en la mayoría de los casos, motivo de desconfianza. Sin embargo, en estas situaciones no estamos tan desprotegidos como creemos. El usuario cuenta con derechos para defendernos de los engaños que ocurren cuando se trata de reparaciones del hogar. La Organización de Consumidores y Usuarios recibe cada año miles de denuncias de este tipo referidas a precios abusivos y falta de información por parte de las empresas de mantenimiento y reparación. Te dejamos algunos consejos para orientarte y no pagar más de lo necesario en tus reparaciones.
- Busca ante todo profesionales de confianza, en estas ocasiones es mejor prevenir que curar, de modo que antes de que te veas en un aprieto asegúrate de los técnicos cercanos que pueden ayudarte si fuera necesario y acude a ellos. Los costes de transporte suelen ser uno de los mayores desembolsos a la hora de una reparación.
- Solicita siempre un presupuesto previo, aunque es difícil estimar el coste exacto de una reparación, sobre todo si el primer contacto es a través de una llamada telefónica, estás es tu derecho de pedir un presupuesto orientativo que incluya coste de desplazamiento, de la mano de obra y los posibles extras.
- Pide varios presupuestos a diferentes empresas y contrasta tus posibilidades
- Si no estás conforme, no firmes. Puede que la empresa en cuestión no deje las cosas del todo clara y añadan costes innecesarios una vez firmado un contrato de reparación que luego tendrás que asumir sin remedio. La mejor manera de evitar estos engaños es obtener toda la información posible de la empresa y de las necesidades de reparación que tienes en casa.
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